En su más reciente episodio de Last Week Tonight, John Oliver dedicó gran parte del programa a analizar la suspensión indefinida de Jimmy Kimmel en ABC. Con un tono crítico y humorístico, el presentador examinó los recientes acontecimientos y las decisiones de los grandes conglomerados mediáticos, destacando cómo estas acciones reflejan un contexto más amplio de presión política y corporativa.
Durante su intervención, Oliver se dirigió directamente al CEO de Disney, Bob Iger, recordando su papel como la tercera voz favorita de Zazú en El Rey León y felicitándolo por la nueva selección del personaje. A través de esta introducción, el comediante lanzó un mensaje contundente sobre la historia que se está escribiendo y cómo los líderes empresariales deben enfrentar momentos críticos, especialmente cuando se trata de defender a sus talentos frente a presiones externas.
Oliver criticó la estrategia de ceder ante demandas de figuras políticas y subrayó que la administración actual no tiene intención de detener sus ataques, citando publicaciones de Donald Trump sobre Kimmel y comentarios del presidente de la FCC, Brendan Carr, que apuntan incluso a The View. “Dar tu almuerzo al matón no lo hace desaparecer. Solo lo hace regresar más hambriento cada vez”, afirmó el conductor, enfatizando la necesidad de poner límites claros frente a demandas absurdas.
Concluyendo su segmento, Oliver propuso un enfoque audaz para los líderes empresariales: resistir y responder con firmeza, usando las palabras que, según él, pueden detener a un acosador: “Fuck you, make me”. Su mensaje, cargado de irreverencia y valentía, busca inspirar a las compañías a priorizar principios sobre conveniencia, recordando que la historia juzgará tanto a quienes actúan con coraje como a quienes optan por la comodidad.