El comediante Bill Burr respondió con contundencia a las críticas tras su participación en el Riyadh Comedy Festival, que se llevó a cabo del 26 de septiembre al 9 de octubre en Arabia Saudita. Durante una entrevista en el podcast “Conan O’Brien Needs a Friend”, Burr aseguró: “No me importa una mierda lo que digan todos estos falsos”, refiriéndose a los comentarios negativos que surgieron en redes sociales y entre colegas del mundo de la comedia.
Burr defendió su presencia en el festival argumentando que su objetivo era simplemente hacer reír al público local. “Es una cosa usar ropa hecha en fábricas con trabajo esclavo. Es otra ir a la fábrica y hacerlos reír. No puedo creer la cantidad de enojo que generó este tema después de que se volvió viral”, expresó Burr, quien destacó la reacción positiva de los asistentes y organizadores. Entre los comediantes que también se presentaron en el festival estuvieron Dave Chappelle, Louis C.K., Kevin Hart, Pete Davidson y Whitney Cummings.
El artista explicó que jamás imaginó que su actuación desataría tanta polémica. Comentarios de figuras como David Cross, Marc Maron y Zach Woods criticaron su participación, llegando Cross a decir: “Estoy disgustado y profundamente decepcionado por todo este asunto”. Burr, sin embargo, reiteró que su experiencia fue positiva: “Fue necesario. Se sintió correcto después. Conecté con ellos y eran personas realmente graciosas. Me divertí mucho”.
Finalmente, Burr calificó su participación en Riad como una de sus tres mejores experiencias en su carrera y afirmó que la recepción de los organizadores y del público fue excelente. Con esta declaración, el comediante busca poner fin a la polémica y reafirmar su postura sobre la importancia de llevar humor a audiencias globales, incluso en contextos culturalmente sensibles.