MPA niega vinculación con la Nueva Función “PG-13” de Instagram para adolescentes

La Motion Picture Association (MPA) aclaró que Meta no los contactó previamente antes de anunciar la nueva función de Instagram destinada a cuentas de adolescentes, que supuestamente se guiaría por el sistema de clasificación PG-13 de Hollywood. Charles Rivkin, presidente y CEO de la MPA, señaló: “La Motion Picture Association no fue contactada por Meta antes del anuncio de su nueva herramienta de moderación de contenido para cuentas de Instagram Teen. Damos la bienvenida a los esfuerzos para proteger a los niños de contenido inapropiado, pero las afirmaciones de que la herramienta estará ‘guiada por las clasificaciones PG-13’ o tendrá conexión con el sistema de la industria cinematográfica son inexactas”.

Instagram había comunicado que la actualización de las cuentas de adolescentes limitaría el contenido al nivel de nudity, sexualidad, lenguaje ofensivo, drogas, violencia y otros temas para adultos, siguiendo lo que describen como las pautas de un PG-13 cinematográfico. Sin embargo, la MPA insistió en que su sistema de clasificación de películas es completamente independiente y se basa en el trabajo de la Classification and Rating Administration (CARA), que opera desde 1968 con una junta de padres encargada de calificar cada película según lo que consideran apropiado para menores de 13 años.

El sistema de clasificación de la MPA, conocido por sus siglas anteriores MPAA, ha sido históricamente voluntario y enfocado en el cine, no en plataformas digitales. Más del 90% de los padres estadounidenses consideran que estas clasificaciones ayudan a tomar mejores decisiones sobre qué contenido es adecuado para sus familias. La MPA representa a los grandes estudios de Hollywood, incluyendo Netflix, Paramount, Sony, Disney, Universal y Warner Bros., entre otros.

Con esta aclaración, la MPA busca diferenciar su autoridad sobre el cine de cualquier intento de Instagram de aplicar sus pautas a contenido digital, dejando en evidencia que la red social actuó de forma independiente sin coordinación previa con la organización. La polémica refleja la creciente atención sobre cómo las plataformas sociales moderan contenido para adolescentes y la importancia de la precisión al citar sistemas de referencia oficiales.