Jodie Foster, una de las actrices más respetadas de Hollywood, ha revelado una anécdota sorprendente sobre su primera impresión del legendario Robert De Niro. Durante una charla en el Festival de Cine de Marrakech, la actriz confesó que, cuando trabajaron juntos en “Taxi Driver” siendo ella una niña de 12 años, le pareció que su compañero de reparto era “realmente poco interesante”.
Foster recordó que De Niro la “tomó bajo su ala” y la llevaba a cafeterías para ensayar sus líneas. Sin embargo, debido a su estricto enfoque en el método actoral para interpretar al perturbado Travis Bickle, las interacciones resultaban aburridas. “Era realmente poco interesante y recuerdo tener estos almuerzos con él y pensar: ‘¿Qué está pasando? ¿Cuándo puedo irme a casa?'”, relató la actriz.
Pero todo cambió en el tercer almuerzo, cuando De Niro le enseñó sobre la improvisación. “Me abrió los ojos a lo que podía ser la actuación”, explicó Foster. “Me di cuenta a los 12 años: ‘Oh, es mi culpa porque no he traído lo suficiente a la mesa’. Tuve esta epifanía. Y creo que a partir de ahí, todo cambió“.
La actriz, que recientemente ganó un Emmy por su papel en “True Detective: Night Country”, también reflexionó sobre su carrera y el estado actual de la industria. Criticó la falta de cuidado hacia los actores infantiles y lamentó que, en películas como “Killers of the Flower Moon”, las historias de las mujeres nativas queden relegadas. A sus 63 años, Foster aseguró orgullosa que seguirá trabajando hasta el final: “Haré películas hasta que me muera. No se desharán de mí tan rápido”.