Una alta ejecutiva de la cadena pública británica Channel 4, Louisa Compton, ha lanzado una dura acusación contra Netflix, afirmando que el gigante del streaming actuó como un “turista de la televisión” al encargar la exitosa y aclamada serie “Adolescence”. La polémica declaración se produjo durante el debate inaugural del prestigioso Festival de Televisión de Edimburgo.
El argumento central de Compton, jefa de noticias y actualidad de Channel 4, es que Netflix solo pudo cosechar el éxito masivo de “Adolescence” porque la televisión pública británica pasó años invirtiendo y desarrollando las carreras de sus creadores, el guionista Jack Thorne y el actor Stephen Graham. “Hemos desarrollado y nutrido el talento que ha permitido a Netflix entrar como ‘turistas de la televisión’ y, efectivamente, encargar la serie. Sin nosotros, eso no habría sucedido”, sentenció.
Compton utilizó este ejemplo para marcar una diferencia fundamental entre los modelos de negocio. “Nosotros nutrimos [el talento] donde los streamers no lo hacen”, afirmó, y agregó una crítica a la falta de programación de actualidad en las plataformas: “¿Dónde están las investigaciones en los streamers sobre Gaza o Trump? Todo es retrospectivo. [La actualidad] es algo único que ofrecen los canales de servicio público”.
El debate también abordó el riesgo de que los productores británicos, en su búsqueda de financiación internacional para competir con los presupuestos de los streamers, terminen alterando el tipo de historias que cuentan para que sean más atractivas para el mercado global, perdiendo así su identidad local. La acusación de “turismo televisivo” pone de manifiesto la creciente tensión entre las cadenas tradicionales, que se ven a sí mismas como semilleros de talento, y los gigantes del streaming, que con su poder económico pueden contratar a esos mismos talentos una vez que ya están consagrados.