Después de verlos en vivo no quedan dudas de por qué la boyband saltó del estrellato de la ficción en la serie Big Time Rush de Nickelodeon al estrellato real más allá de la pantalla: nadie lo hace como ellos.
Logan, Kendall, James y Carlos conforman Big Time Rush, una de las boybands más trascendentes de todos los tiempos. A nadie que los haya visto anoche en el Estadio Obras le puede quedar ninguna duda acerca del por qué. La simbiosis artística que encarnaron fue perfecta, complementándose vocalmente y brillando con sus coreografías en un show dinámico de principio a fin. La visita se dio en el marco de su exitosa gira internacional “Forever Tour”, que incluyó venues de la talla del Madison Square Garden y que además de incluir a Argentina, en su parte Sudamericana tuvo paradas en Chile y seguirá en Colombia y Brasil.
Cerca de las 9 de la noche, todos las miradas expectantes se fijaban sobre un telón con la leyenda “Big Time Rush Forever Tour”. Como en cada ocasión, el público argentino le dio a los artistas un poco de eso que lo vuelve único en el mundo coreando todos juntos “Big Time Rush, Big Time Rush”. Es que la pasión de los rushers, como se autodenominan los fans de la banda, es muy fuerte en Argentina. El telón cayó y comenzó la magia con el hit “Windows Down”.
Uno de los momentos más especiales de una noche llena de sorpresas y momentos especiales sin dudas se dio cuando la banda interpretó su single “Dale Pa’ Ya”, el éxito con el que apostaron por honrar a sus fans hispanohablantes. El público los acompañó con entusiasmo en esta canción en español, cantándola como nunca en todo el mundo. Otra de las sorpresas de la noche llegaría con “Worldwide”, coreando a todos sus fans a quienes les dedicaron la canción en uno de los momentos más tranquilos y emotivos de un show mayormente enérgico y vibrante.
Durante más de una hora y media, Big Time Rush le regaló a sus fans un recorrido súper completo por sus tres trabajos discográficos BTR (2010), Elevate (2011), y 24/Seven (2013). Estrenaron novedades como “Dale Pa’ Ya” y la novísima “Can´t Get Enough”, y equilibraron haciendo un paso obligado por favoritos como “Halfway There” y “Big Time”, éxitos que los llevaron a la fama global. Para cuando llegó el cierre de una noche llena de emociones que tuvo al público saltando y coreando sin parar, la cereza del postre vino con “Boyfriend”. Mientras caía confetti en el final, las sonrisas invadieron al público que pudo disfrutar de la entrega y la química de esta banda que demuestra el amor por la música y por sus fans cada vez que se sube a un escenario.