El cantante de country-hip hop Jelly Roll hizo una pausa en su gira europea para volar a Nueva York junto con toda su banda y presentarse en la gala del 50º aniversario de la Fundación T.J. Martell, celebrada en Cipriani 42nd Street. El evento superó todas las expectativas al recaudar más de 2,2 millones de dólares destinados a la investigación contra el cáncer.
A diferencia de otros shows benéficos, donde los artistas suelen interpretar unas pocas canciones, Jelly Roll ofreció casi su repertorio completo de gira, con temas como “Liar”, “I’m Not OK” y “Save Me”, además de un medley de rap con clásicos de N.W.A, Eminem y Outkast. Durante su discurso, confesó estar más nervioso de lo habitual y compartió con humor: “Probablemente la vez que más nervioso estuve fue cuando canté recientemente en el Vaticano para el Papa. Y la primera vez que fui invitado a la fiesta previa a los Grammy de Clive Davis. ¡Clive Davis y el Papa! Solo en un evento como este pueden suceder comparaciones así”.
El encuentro también contó con la participación del cantante británico Sekou, quien interpretó “Love Language” y “Better Man”. Además, la velada fue organizada por el presidente de la junta de la Fundación y Republic EVP, junto con el comité ejecutivo, y reunió a destacados líderes de la industria musical como Julie Swidler (Sony Music), Seth England (Big Loud) y Jon Loba (BMG).
Uno de los momentos más significativos de la noche fue la entrega del primer premio Circle of Legends, que rindió homenaje a influyentes figuras de la música por su apoyo constante a la misión de la fundación. Entre los galardonados, algunos de manera póstuma, destacaron nombres como Clive Davis, Berry Gordy, Jimmy Jam, Tommy Mottola y Chaka Zulu, quien además habló sobre su labor en la prevención del cáncer.