La directora Kathryn Bigelow vuelve a la gran pantalla con A House of Dynamite, un thriller político sobre el peligro de la guerra nuclear que se estrena este martes en el Festival de Cine de Venecia. La película sigue a funcionarios de la Casa Blanca que deben enfrentar un ataque inminente con misiles contra Estados Unidos, con Idris Elba y Rebecca Ferguson en los roles principales.
Bigelow describió el film como una invitación a reflexionar sobre la proliferación nuclear. “¿Cómo puede ser la aniquilación del mundo una medida defensiva?”, se preguntó la directora durante la conferencia de prensa en Venecia. La obra busca generar conciencia sobre la necesidad de reducir el arsenal nuclear global y los riesgos de vivir en lo que ella llama “una casa de dinamita”.
Elba interpreta a un asesor de seguridad nacional que debe tomar decisiones extremas en circunstancias críticas, mientras Ferguson encarna a una alta funcionaria que mantiene en funcionamiento el gobierno en medio del caos. Ambos destacaron el enfoque ultra-inmersivo del rodaje, diseñado para sumergir al espectador en la sala de crisis de la Casa Blanca, describiéndolo como “casi un documental”.
El guionista Noah Oppenheim agregó que la película pretende reflejar “la realidad del mundo desde la era nuclear”, sin centrarse en dinámicas geopolíticas concretas, sino en el peligro global que representan los arsenales de nueve países capaces de acabar con la civilización varias veces.
“A House of Dynamite” marca el regreso de Bigelow tras ocho años desde Detroit (2017) y la primera vez que regresa a Venecia desde The Hurt Locker (2008), filme que le valió el Oscar a mejor directora. La cineasta fue recibida con aplausos durante la presentación, recordando su capacidad para combinar tensión narrativa con comentarios de relevancia social.