El reconocido creador de series como “Hannibal” y “Pushing Daisies”, Bryan Fuller, da un paso decisivo en su carrera con su ópera prima en cine, el filme “Dust Bunny”, que tendrá su estreno mundial en el Toronto International Film Festival (TIFF) dentro de la sección Midnight Madness. La película combina terror y fantasía con un tono accesible para toda la familia, marcando un cambio de rumbo para el creativo que hasta ahora había brillado principalmente en la televisión.
La historia sigue a Aurora (interpretada por Sophie Sloan), una niña que descubre que bajo su cama habita una criatura mágica y sangrienta. Para enfrentarla, recurre a un asesino a sueldo, papel a cargo de Mads Mikkelsen, recordado por su participación en “Hannibal”. Fuller explicó que la idea nació como un posible episodio para la serie “Amazing Stories” en Apple TV+, inspirada en la antología creada por Steven Spielberg en los años 80, pero tras múltiples trabas en el proceso de desarrollo decidió transformarla en una película independiente.
En entrevistas, Fuller confesó que aunque nunca pensó seriamente en dirigir, una mala experiencia con un realizador lo impulsó a tomar las riendas creativas: “Esto no podía volver a pasar. Necesitaba dirigir”. También destacó la complicidad con Sophie Sloan durante el rodaje: “Mis días favoritos eran con Sophie, que tenía tanta experiencia en cine como yo —ninguna—. Descubrimos juntos cómo jugar con los diálogos y construir el personaje. Fue como tener citas para jugar”. El director subrayó que quiso garantizar un entorno sano y seguro para una actriz infantil mientras exploraban la historia.
Visualmente, “Dust Bunny” conserva el sello distintivo de Fuller, con un uso expresivo del color que ya había marcado sus trabajos televisivos. En colaboración con la directora de fotografía Nicole Hirsch Whitaker, definió la estética a través de sabores más que de tonalidades: “Si ‘Pushing Daisies’ es dulce y ‘Hannibal’ es salado, esta película debía ser pollo con mango: dulce y sabroso, con un perfil dinámico”. Aun con algunos momentos de suspenso, Fuller sostiene que se trata de una puerta de entrada al terror para toda la familia, al estilo de clásicos como “Gremlins”, que marcaron a toda una generación en los años 80.