Más de 20 años después de dirigir las dos primeras películas de Harry Potter, Chris Columbus ha regresado al Reino Unido con otra propuesta que podría convertirse en franquicia: The Thursday Murder Club, ahora disponible en Netflix.
Al igual que Potter, la película está adaptada de un libro muy popular, en este caso de Richard Osman, y sigue a un grupo de amigos de distintas edades que residen en un elegante edificio tipo castillo y resuelven enigmas… aunque esta vez no de magia, sino de asesinato. Los protagonistas son octogenarios que viven en la ficticia residencia Coopers Chase, y el reparto incluye a Helen Mirren, Pierce Brosnan, Ben Kingsley y Celia Imrie, con papeles secundarios de David Tennant y Naomi Ackie. Columbus comenta que “los actores más profesionales y talentosos del mundo” se encuentran en el Reino Unido.
Columbus explica a Variety que se enamoró de los personajes desde la primera lectura y que pudo imaginar al reparto de inmediato. “Hice una pequeña lista con mis cuatro primeras elecciones y todos dijeron que sí. Eso no me había pasado desde Harry Potter. Fue extraordinaria la química desde el primer ensayo.” Además, destaca que para que la adaptación tuviera éxito, era esencial mantenerse fiel al tono y la trama del libro, evitando cambios innecesarios como introducir subtramas que no existían en la obra original.
El director también señala que lo que más le atrajo del libro fue su combinación de humor británico afilado y emoción genuina: “Los misterios de asesinato suelen ser fríos y procedimentales, pero este libro es increíblemente emocional y muy divertido. Quise preservar eso en la película, junto con algunos toques creativos, como un sketch subido de tono que no estaba en el libro.”