Dolores Fonzi vuelve al cine como directora, guionista y protagonista con Belén, su segundo largometraje, que se estrenará en competencia por la Concha de Oro del Festival de San Sebastián. La película aborda la historia real de Julieta, una joven encarcelada tras sufrir un aborto espontáneo, y de Soledad Deza (interpretada por Fonzi), la abogada que desafía un sistema judicial plagado de injusticias y desigualdad de género en la provincia de Tucumán.
Producida por K&S Films, el estudio argentino detrás de Relatos Salvajes y El Eternauta, Belén se convierte en un retrato de la lucha por los derechos reproductivos y la equidad legal. La historia refleja cómo el caso de Julieta impulsó un movimiento de solidaridad y protestas que tuvo repercusión nacional e internacional, mientras que su identidad se preserva bajo el seudónimo de Belén. Basada en el libro We Are Belén de Ana Correa, la película funciona como un homenaje a la resiliencia y la sororidad.
Fonzi recuerda cómo se vinculó personalmente con la historia: “Además de ser actriz, soy activista por los derechos humanos desde hace tiempo. Me enteré de una joven, Belén, que había sido encarcelada por un aborto espontáneo. Cuando fui a recibir un premio, saqué un cartel que decía ‘Libertad para Belén’ y hablé sobre ello durante la ceremonia. Salió en la prensa internacional y causó un gran impacto”. La oportunidad de dirigir y escribir el filme surgió poco después, cuando Leticia Cristi de K&S Films le propuso encargarse del proyecto.
El estreno mundial de Belén será el 23 de septiembre en el Festival de San Sebastián, que se celebra del 19 al 27 de septiembre. Fonzi destaca la importancia del festival en la visibilidad del cine latinoamericano y el impacto social de sus historias: “San Sebastián siempre nos ha permitido crear momentos que dan visibilidad a las luchas que enfrentamos”. Con esta película, Fonzi combina su compromiso con los derechos humanos y su pasión por el cine, consolidándose como una voz potente dentro del cine argentino contemporáneo.