El director original de Naked Gun critica el reboot: “Todos están en esto por el dinero”

El cineasta David Zucker, responsable de las dos primeras entregas de Naked Gun, expresó su fuerte descontento con el reboot protagonizado por Liam Neeson y Pamela Anderson. En conversación con Woman’s World, Zucker afirmó que la nueva versión “intentó copiar nuestro estilo”, pero terminó fallando en capturar la esencia del humor absurdo que él, su hermano Jerry y Jim Abrahams perfeccionaron hace décadas. “Mi hermano, Jerry, y nuestro socio, Jim Abrahams, empezaron a hacer comedias parodia hace 50 años, y nosotros originamos nuestro propio estilo — y lo hicimos tan bien que parece fácil, evidentemente”, señaló. “La gente empezó a copiarlo, como Seth MacFarlane para la nueva ‘Naked Gun’. Él lo perdió por completo.”

El reboot, dirigido por Akiva Schaffer y con guion de Dan Gregor y Doug Mand, contó además con Seth MacFarlane como uno de sus productores principales. Sin embargo, Zucker sostiene que la película se aleja por completo del espíritu original. También criticó el presupuesto de la nueva entrega, que ascendió a $42 millones, comparado con los $14.5 millones del filme de 1988. Aunque, ajustado por inflación, el presupuesto original equivaldría a unos $38 millones en 2025, Zucker insiste en que ese tipo de cifras distorsionan lo que debería ser una comedia. “No deberías gastar demasiado dinero en comedias, y una de nuestras reglas es sobre el despliegue técnico”, comentó. “Los grandes presupuestos y la comedia son opuestos, y en la nueva ‘Naked Gun’ se nota que gastaron mucho dinero en escenas llenas de artificio técnico mientras intentaban copiar nuestro estilo.”

El director de Airplane! —considerada una referencia del humor paródico— remarcó que una parte del problema radica en una industria cada vez más enfocada en lo comercial. Según él, el reboot se siente menos como un homenaje y más como un producto fabricado para generar ganancias sin comprender el alma de la franquicia. “Ahora todos están en esto por el dinero, y parece que esa es la única razón por la que quisieron hacer una nueva ‘Naked Gun’”, afirmó con contundencia.

Las declaraciones de Zucker reavivan el debate sobre la dificultad de revivir comedias icónicas bajo la mirada contemporánea de Hollywood. Entre expectativas del público, fórmulas que ya no funcionan igual y estilos humorísticos difíciles de replicar, el reboot de Naked Gun enfrenta el reto de demostrar que puede recuperar la chispa que convirtió a la saga original en un clásico del cine paródico. Si lo consigue o no será una discusión que apenas comienza.