McQuarrie afirma que a través de este arco épico de dos películas, la historia de Misión Imposible: Sentencia Mortal “llevará literalmente a los espectadores a las cuatro esquinas del globo”. Un director que pone mucha atención en dejar que las locaciones modelen sus historias y crea la escritura de las escenas en torno a ellas, en lugar de que sea al contrario, proporciona un sabor internacional genuinamente auténtico.
Para Sentencia Mortal – Parte Uno, estas locaciones incluyen los impresionantes desiertos de Abu Dabi, las laberínticas calles y canales de Venecia; la histórica ciudad capital de Roma, así como las vastas montañas de Noruega (que representan los Alpes austriacos) y en cada lugar se siente tonalmente la diferencia en la pantalla, como si se tratara de otro personaje en la historia. “Así es como hacemos estas películas”, explica McQuarrie. “El lugar donde filmamos la película nos informa cómo debemos hacer el rodaje. La locación dicta la acción”.
Abu Dabi
Con este mantra en mente, Abu Dabi ofreció a la producción numerosas posibilidades. La primera fue una terminal de aeropuerto completamente nueva, la Terminal Midfield, que aún estaba en construcción cuando filmaron dentro de ella pero, cuando se inaugure, será la terminal internacional de un aeropuerto más grande en el mundo.
Construida asimétricamente para reflejar las dunas de arena que lo rodean, el aeropuerto proporcionó un acceso sin precedentes y una oportunidad única. “Tuvimos mucha suerte de que el aeropuerto de Abu Dabi aún no se inaugurara, pero estaba muy cerca de terminarse y fue una locación extraordinaria, hermosa y espaciosa. Con una escala épica”, afirma McQuarrie. “Una dificultad de filmar en los aeropuertos es, por supuesto, que se trata de un ambiente extremadamente seguro. Y la ventaja de filmar en un aeropuerto que no se ha inaugurado, fue que no teníamos que contender con limitaciones de dónde podíamos filmar o no… Tengo la plena confianza de decir que nunca volverán a ver una secuencia como ésta”.
La Terminal Midfield forma el trasfondo de una secuencia de persecución que Pegg describe así, “La clase de alta acción que usualmente terminaría una película. ¡Pero en la nuestra está cerca del principio! Es una secuencia grandiosa, con tres de nosotros en diferentes lugares, lidiando con tres crisis diferentes. Esto realmente muestra la escala, la complejidad y la diversión de lo que tiene para ofrecer esta película. Y esto es apenas la punta del iceberg”.
Los realizadores cinematográficos se fascinaron por la deliciosa yuxtaposición que ofrece la capital de los Emiratos Árabes Unidos, la combinación de una ciudad de alta tecnología y un excepcional paisaje desértico. Las arenas de los EAU servirían a la larga para tres propósitos en Misión Imposible: Sentencia Mortal – Parte Uno.
La locación, donde se filmó durante más de 12 días en febrero de 2021, específicamente en el área desértica de Liwa, también conocida como The Empty Quarter, no sólo proporcionó ondulantes dunas, también tenía un espacio plano en el cual el diseñador de producción, Gary Freeman y su equipo construyeron un pueblo minero abandonado en sólo cinco semanas. Este escenario fue para una secuencia donde Ethan Hunt, que cruzó el desierto a caballo, descubre a Ilsa Faust, siendo atacada por los mercenarios que la perseguían.
“Algo maravilloso acerca de Ilsa es que nunca sabes realmente por qué está donde está”, dice Ferguson, cuyo personaje, que apareció al inicio de la película, ahora afronta un precio por su cabeza. “Cuando la encontramos, Ilsa se volvió bastante solitaria y ella se encuentra en esta hermosa villa como fugitiva en el medio del desierto. Creo que ella estaba esperando su momento final. Obviamente, Ethan no permitirá que se cumpla su destino y después nos vamos de viaje después de esta reunión”, sonríe ella.
“Cuando decidimos que filmaríamos en Abu Dabi, comenzamos como una piedrecilla que rueda colina abajo”, comenta McQuarrie. “Una cosa llevó a la otra”. Y así fue en todas las secuencias que se presentarían en Abu Dabi, sin un orden en particular: Dos Osprey V-22 Raptors (helicópteros de ataque enormes, de alta velocidad y amplio rango, con tecnología de punta), concedidos a Cruise gracias a sus relaciones con el Departamento de Defensa de Estados Unidos y que recibieron permiso de ingresar al país por parte del ejército de los EAU, la autoridad del aeropuerto y el control del tráfico aéreo; así como una manada de caballos españoles y árabes.
En lo que se refiere a los caballos, naturalmente Cruise realizó su propio montaje en un increíble caballo pura sangre llamado Zeus. A Cruise nunca lo doblaron para todas las tomas que muestran a Ethan galopando en Zeus, con un gran vínculo entre los dos. “Aunque pienso que Zeus está convencido de que él es la estrella de esta película, y su coestrella es Tom Cruise”, dice con ironía McQuarrie.
El director describe la filmación de una impresionante tormenta de arena como “complicaciones arriba de complicaciones”. Encargado de crear esta escena estuvo el equipo de efectos visuales dirigido por Neil Corbould y Keith Dawson, que usaron una combinación de gigantescos ventiladores V8 y la clase de imaginación desbordada que únicamente se puede fomentar en un set de Misión Imposible.
“El punto fuerte fue el motor de un jet”, sonríe Gormley. “Pensé que estaban locos, pero resultó que estaban en lo correcto. Literalmente era un motor de jet sobre un gigantesco camión con una horquilla y anclado a tierra por bloques de concreto para que no despegara. Una vez que se encendió, generó su propia tormenta de arena, y fue increíblemente efectivo para ello”.
Debemos decir todo, el calor y la complejidad demostró que valió la pena todo el esfuerzo. “Cuando empezamos a hablar sobre esta película en términos de la sensación de aventura, le dije a Tom que deseaba encontrar la forma de tener una pelea de espadas en el rodaje, tener caballos y desiertos y tormentas de arena y locaciones exóticas que se sintieran un poco atávicas, pero no de manera deliberada, sino muy orgánicamente”, explica McQuarrie. “Y esto se desarrolló explosivamente”.
Roma, Italia
El elenco y el equipo llegaron a Roma el 4 de octubre de 2020, para filmar una persecución en auto y en motocicleta a través de las antiguas calles de La Ciudad Eterna. “Y Roma es una ciudad famosamente engañosa para filmar, con todo el tráfico y las calles empedradas”, comenta McQuarrie. “Todo esto que aporta el carácter a la ciudad, también hace que la conducción sea impredecible cuando tratas de girar y derrapar… Tratar de dar vueltas vertiginosas cada vez cuando vas en una dirección, es difícil cuando la calle empedrada te indica, ‘No, no puedes, vas en esta dirección’”.
Además, debemos decir que ésta no era cualquier persecución de autos, comenzando con el hecho de que Grace, interpretada por Atwell, robó una patrulla de policía y Ethan la persigue en una motocicleta antes de que, después de una increíble filmación en el Foro Imperiale, se encuentran esposados juntos y escapando en un BMW M5 Competition, para después tratar de copilotar un Fiat 500 amarillo brillante con un moderno motor de alto rendimiento eléctrico.
“El auto se convirtió en un personaje por sí mismo”, dice McQuarrie. “Era completamente peligroso e impredecible. No creo que pudiéramos haber hecho una secuencia más difícil para su filmación si hubiéramos ido en una dirección para hacerlo”.
Lograron cerrar las calles de Roma por primera vez en la historia, incluyendo una de las calles más famosas en la ciudad, la Via dei Fori Imperiali, donde la producción rodó durante dos días – (“Habían hecho filmaciones por la noche, pero nunca rodaron una enorme secuencia de persecución de autos durante el día”, resalta el gerente supervisor de locaciones David Campbell-Bell), por lo cual, los realizadores cinematográficos aprovecharon al máximo este logro y, en la verdadera costumbre de Misión, todo lo que se filmó fue completamente práctico. Esto, dice McQuarrie, es el tributo turbocargado que realizaron él y Cruise a La Dolce Vita, de Federico Fellini.
“Como dije antes, para nosotros, la locación dicta la acción, y así sucedió en Roma”, repite McQuarrie. “Llegamos a Roma para filmar una persecución de autos y dejamos que la ciudad nos indicara la clase de persecución que sería. Y esta locación se prestó para algo inusual en la franquicia, que resultó algo con mucho humor, una carrera ligeramente más romántica de las que habíamos hecho antes”.
Atwell añade, “Tom conducía y derrapaba con una mano a través de las calles de Roma… Éste será un día que nunca olvidaré”.
Venecia, Italia
Después de nueve días de rodaje en la capital italiana, el equipo viajó a Venecia para filmar durante dos semanas, a partir del 21 de octubre de 2020. “Venecia es una de mis ciudades favoritas en el mundo. Pero desde el principio observamos que es como un laberinto. Si eres un extranjero es muy fácil que te pierdas. Decidimos apostar a eso. Venecia se convirtió en un laberinto donde el equipo fue atraído por el enemigo”, afirma McQuarrie.
El director y Cruise habían deseado filmar en la ciudad desde hacía 14 años. Pero, muy atentos para evitar la forma en que se suele mostrar en escena, ellos optaron por mantener básicamente la acción fuera del agua, y se enfocaron en la arquitectura gótica de Venecia, con su particular ambiente.
“McQuarrie deseaba lograr casi la clase de estética de una película de terror. Muy oscura, muy intimidante”, afirma el diseñador de producción Gary Freeman. Para entrar en esa mentalidad, una noche en su hotel, Pegg, Atwell y Davis incluso se sentaron para ver el horror seminal en Don’t Look Now, de Nicolas Roeg. “Después, al día siguiente fuimos a buscar los puentes y locaciones en dicha película, ¡y vi una chica con un abrigo rojo!”. Pegg tiene un escalofrío.
Mientras las escenas de Roma se filmaron a la luz del día, toda la acción en Venecia se filmó de noche, comenzando con una gala a la media noche donde participan la mayoría de nuestros personajes principales, en el Palacio Ducal. Construido en 1340, la antigua residencia Ducal (suprema autoridad) de Venecia, es una de sus construcciones más famosas. “Pero deseábamos filmar en una forma que no se hubiera realizado antes”, insiste McQuarrie. “Así que nos centramos en la luz y el color, poniendo unos proyectores digitales que en realidad convirtieron al Palacio Ducal en un personaje en sí mismo. En lugar de que fuera únicamente una estructura sólida, buscamos que el edificio se sintiera vivo”.
El director afirma, nuestro brillante iluminador, Martin Smith, y nuestro director de fotografía, Fraser Taggart crearon “un extraordinario mundo donde nos podíamos mover muy fluidamente”. Todo esto está bañado en asombrosos tonos rojos y azules provenientes del campanario de la Basílica de San Marcos.
Cruise también había deseado filmar en Venecia desde la primera Misión Imposible y se sintió encantado de lograrlo. Finalmente. Con la filmación original programada para iniciar en la ciudad en febrero de 2020, llegó la pandemia, así que la región de Venecia y el Veneto fueron de las primeras áreas en Europa que cerraron. Todo quedó en pausa.
La industria del cine, igual que muchas otras, se cerraron para los negocios. La diferencia para Sentencia Mortal – Parte Uno fue que tenía a Tom Cruise en su esquina. “Inmediatamente Tom se enfocó en reconstruir un plan de producción sobre cómo podríamos hacer la película”, explica Gormley. Con Cruise desarrollando lo que el productor ejecutivo describe como el ‘estándar de oro’ de los protocolos pandémicos, 10 meses después, con sus callejones y canales desiertos, Sentencia Mortal – Parte Uno logró lo que parecía imposible, regresar a Venecia.
“Era invierno en la ciudad cuando el equipo regresó y aunque el programa, filmar en las noches de 6 pm a 6 am, no ayudaba exactamente con el frío, el gélido aire nocturno añadió una sensación hechizante, extraña, bellamente seductora, que resultó perfecta para estas secuencias”, añade Campbell-Bell. Incluso si, algo bastante apropiado, la iluminación en el lugar era bastante complicada.
“Venecia tiene una larga historia, así que es muy difícil filmar ahí”, comenta McQuarrie. “Una de las razones que me atrajo para rodar aquí es que nunca se había filmado de la forma en que yo la imaginaba. El desafío de la filmación fue encontrar una forma de rodar por la noche de tal manera que la ciudad no pareciera un set”. Como estaba prohibido acoplar cualquier luz a sus magníficos edificios, “esto hacía extremadamente difícil darle profundidad, textura y atmósfera a las tomas”.
Al filmar una escena que presentaba Cruise y Ferguson durante el ocaso en el techo del Palacio Gritti, McQuarrie y Cruise modificaron la escena de nuevo. “Teníamos intenciones de una escena distinta, pero cuando subimos ahí para ensayar y vimos a través de los lentes, sentimos que no cumplía con el ambiente. Nosotros siempre consideramos, ‘¿Qué te está diciendo el cuadro? ¿Cómo se siente la escena?’. En consecuencia, reescribimos todo”, dice McQuarrie.
Los realizadores cinematográficos aplicaron la misma agilidad de pensamiento en lo relativo a la persecución a pie de Misión Imposible por la cual la franquicia es tan famosa, con Cruise corriendo furiosamente a toda velocidad a través del laberinto de Venecia perseguido por los agentes Briggs y Degas. “El ambiente de una escena siempre es impuesto por el lugar donde estamos filmando, en lugar de que tratemos de forzar un ambiente dentro de una película. Absorbemos en la película las circunstancias que nos rodean”, comenta McQuarrie sobre lo que pueden esperar los fans de Cruise por su trabajo a pie esta vez.
Un total de 55 electricistas, navegando con toda su maquinaria en 20 gabarras pequeñas, trabajaron día y noche para mover el equipo necesario por los canales de Venecia y llevarlo al set a mano (no se permiten vehículos en la ciudad), para ser capaces de iluminar las múltiples locaciones de la persecución a pie. El clímax de la persecución es Ponte Minich, un hermoso puente en el Castillo Sestiere. “No había personas, no había turistas, no había botes”, comenta Ferguson sobre cómo fueron sus primeros días en el set. “Las aguas de Venecia eran color turquesa. Nunca olvidaré la filmación de esa escena, una pelea de espadas sobre las aguas turquesas. Pero esto es lo que trae Misión a sus cinéfilos. Te llevan a lo alto”.
Noruega
Y después, por supuesto, estaba Noruega. Representando a Austria en la historia de Secuencia Mortal – Parte Uno, la producción regresó al exuberante paisaje escandinavo, pues ahí filmó la secuencia climática de Fallout tres años antes; en esta ocasión, la locación era incluso más exuberante.
El espectacular escenario otoñal proporcionó el telón de fondo perfecto para el tercer acto esencial en la película, que incluye una acrobacia de un salto en motocicleta que induce al vértigo realizado por Cruise, así como la impresionante secuencia del tren que involucra a casi todos los personajes principales de la película.
Fuente: Paramount Pictures