Rápidos y Furiosos X, la décima entrega de la saga Rápidos y Furiosos, presenta los capítulos finales de una de las franquicias mundiales más famosas e históricas del cine.
John Cena vuelve para interpretar a Jakob Toretto, el hermano menor de Dom y su antiguo rival. Desde el debut de Jakob en Rápidos y Furiosos 9, él y Dom han dejado atrás sus problemas y ahora ambos están motivados para proteger a su familia. “Jakob quería la aprobación de su hermano mientras esperaba quitarse de encima el peso de la muerte de su padre”, comenta Cena. “Casi de un plumazo, Dom fue capaz de hacerlo. Dom nunca le da la espalda a la familia y una vez que hizo las pases con Jakob, éste pudo quitarse la maldad de encima. Al final de Rápidos y Furiosos 9 dejamos a Jakob con el enorme favor de recibir un regalo de su hermano mayor. Creo que es obvio que hay una conexión y Jakob ya no es un marginado”.
En Rápidos y Furiosos X, Jakob tiene un rol crucial: el de proteger al pequeño Brian. “Jakob cumple su promesa y muestra lealtad a su familia en Rápidos y Furiosos X”, afirma Cena. “La familia Toretto ha sido objetivo de Dante y la suya es una verdadera estrategia de venganza. Dom llama a su hermano menor para que lo ayude a proteger a su hijo porque no quiere poner a su hermana Mia en la mira. Dom quiere que Mia se ponga a salvo con Brian y su familia, así que Jakob es llamado para ser el guardián del pequeño B. Puesto que Jakob es un personaje nuevo, no creo que haya restricciones en cuanto a lo vulnerable que puede llegar a ser, o cómo debería comportarse. Claro que lo vimos siendo un espía y un enemigo muy hábil en Rápidos y Furiosos 9, pero en esta entrega había mucho espacio para jugar con el personaje. No sólo lo vemos convertirse rápidamente en el tío cool del pequeño B, sino que también lo volvemos a ver mostrando su capacidad de ser creativo y sensible”.