A un año de su mediático enfrentamiento con la empresa de inteligencia artificial OpenAI, la actriz Scarlett Johansson ha vuelto a referirse a los dilemas que plantea la tecnología en la industria del cine. Durante una entrevista con el periódico The Times en el marco de la promoción de su nueva película, “Jurassic World: Rebirth”, la estrella de Hollywood reflexionó sobre el valor de la interpretación humana en la era de la IA.
El conflicto se desató en mayo de 2024, cuando OpenAI presentó una nueva voz para su asistente ChatGPT, llamada “Sky”, que era inquietantemente similar a la de Johansson. La polémica creció cuando el CEO de la compañía, Sam Altman, tuiteó la palabra “ella”, en alusión a la película “Her”, donde la actriz interpretó a una inteligencia artificial. Johansson reveló entonces que Altman le había ofrecido ser la voz del sistema, propuesta que ella había rechazado, lo que obligó a la empresa a retirar la voz “Sky” y sentó un importante precedente sobre los derechos de imagen y voz de los artistas.
Ahora, un año después, la actriz reafirma su postura sobre los límites de esta tecnología en su profesión. “Simplemente considero que mi trabajo no puede ser realizado por la inteligencia artificial”, declaró a The Times. “No creo que la emotividad de una interpretación pueda replicarse”, sentenció, argumentando que la esencia de la actuación radica en la capacidad humana de transmitir emociones genuinas, algo que, en su opinión, la tecnología no puede imitar.
A pesar de su firme postura, Johansson reconoció que la IA puede ser una herramienta útil en la producción cinematográfica, especialmente en áreas como los efectos especiales. Sin embargo, trazó una línea clara, insistiendo en que la tecnología nunca debe sustituir la creatividad y la profunda conexión emocional que solo un intérprete humano puede ofrecer.