Jon Thoday, cofundador de Avalon, respondió con firmeza a la demanda de Studiocanal y el legado de Michael Bond, quienes alegan que Spitting Image infringió derechos de autor al retratar a Paddington como un osito drogadicto y podcaster. Durante MIPCOM en Cannes, Thoday expresó su sorpresa: “No me pasó por la cabeza que una compañía que también hace comedia nos demandara por, esencialmente, una broma”. Destacó además su admiración por las películas de Paddington, especialmente la segunda entrega, y cuestionó la acción legal contra un programa que se centra en la sátira.
El productor explicó que históricamente, las figuras parodiadas en Spitting Image han recibido con orgullo sus representaciones en muñecos, incluso algunas han intentado comprarlos. “Hubo una discusión sobre si debíamos escuchar a Studiocanal o seguir parodiando lo que nos parece gracioso. Dije, por supuesto, que debíamos apoyar a los creativos del show y dejar que la ley haga su trabajo”, señaló Thoday. La serie continúa en su línea satírica: un segundo sketch muestra a Paddington inhalando polvo blanco mientras limpia los papeles legales de “Studio C-Anal”, aunque sin su característico abrigo rojo y sombrero.
Thoday también recordó que Studiocanal ha producido su propia comedia satírica, Les Guignols, y resaltó su aprecio por los filmes del estudio, incluyendo clásicos como The Producers y varias comedias de Ealing. “No puedo imaginar que Mel Brooks pensara que atacar a un oso es un buen uso de dinero”, comentó irónicamente. Para Avalon, la situación refuerza la importancia de la libertad de expresión: “Creo que los comediantes deben poder hacer bromas, como siempre lo han hecho, y eso es lo que hace Spitting Image”.
Mientras Avalon continúa defendiendo el programa, Thoday confirmó que la serie sigue en gira internacional, buscando compradores en Cannes junto a otros éxitos de la productora, como Taskmaster y el nuevo drama cómico narrado por Julia Roberts, Leonard and Hungry Paul. La controversia, más que frenar el show, podría amplificar su alcance mediático y consolidar la sátira como su sello distintivo.