Review de Daymare: 1994 Sandcastle por @_agustin.coronel
Los amantes de los juegos de terror han sido testigos de un renacimiento en el género en los últimos años, con una oleada de lanzamientos que recuerda a la época dorada del survival horror. Sin embargo, durante mucho tiempo, los aficionados a este género pasaron hambre, ya que las grandes compañías abandonaron el survival horror en favor de títulos que consideraban más rentables. Fue entonces cuando los estudios independientes asumieron la tarea de recuperar este género olvidado.
Invader Studios comenzó su travesía rehaciendo Resident Evil 2 con mecánicas modernas, pero pronto se vieron forzados a crear su propia saga, que hoy nos ocupa, cuando Capcom anunció oficialmente el desarrollo del remake. En este análisis, exploraremos las fortalezas y debilidades de Daymare: 1994 Sandcastle.
- Una Receta Familiar con Toques Propios
Daymare: 1994 Sandcastle es un juego de acción y terror en tercera persona que se inspira claramente en la icónica saga de Capcom, en particular en la vertiente que se inició con Resident Evil 4. En esta precuela, encontramos todos los ingredientes típicos de una aventura de este tipo: criaturas extrañas que amenazan con matarnos, experimentos que manipulan la vida humana, tensiones políticas y un toque de drama personal. No podemos esperar una historia memorable, pero es innegable que el estudio italiano ha puesto esfuerzo en ofrecer una narrativa con cierto peso que contribuye a la atmósfera del juego.
- Aciertos y Tropiezos en el Combate
Sin embargo, el combate en Daymare: 1994 Sandcastle presenta un problema crucial: los controles. La restricción de movimiento a líneas rectas o diagonales puede resultar extremadamente frustrante en momentos de intensidad. Cambiar de arma o curarse en mitad de un enfrentamiento se convierte en una tarea complicada que afecta negativamente la fluidez de las batallas. Esto es una verdadera lástima, ya que el combate es una parte fundamental de cualquier juego de terror de supervivencia.
En el aspecto visual, el juego se destaca como un logro notable para un proyecto independiente. A pesar de algunas carencias en las animaciones, el diseño gráfico es impresionante y muestra el esfuerzo del equipo de desarrollo. Sin embargo, la falta de variedad en el diseño artístico de los escenarios y enemigos podría haberse mejorado. La falta de diversidad en este aspecto puede causar fatiga visual a medida que avanzas en la historia, ya que te enfrentas constantemente a los mismos entornos y enemigos.
- Enfrentando Horrores con Recursos Limitados
Daymare: 1994 Sandcastle introduce una mayor cantidad de enemigos en comparación con su predecesor, y estos son más rápidos, letales y aterradores. No es un paseo por el parque, y no podemos esperar que los enemigos nos den una calurosa bienvenida. El juego nos proporciona un par de armas de fuego y un ingenioso equipo de nitrógeno que ofrece una variedad de posibilidades para enfrentar a cualquier amenaza que se cruce en nuestro camino.
El sistema de nitrógeno es una característica que no debemos pasar por alto. Nos permite ahorrar munición y evita que suframos inesperados ataques. Si bien las armas de fuego son la opción estándar para derrotar a los enemigos, no todos son igualmente vulnerables a ellas. Esta variedad en la forma en que los enemigos reaccionan a nuestras tácticas agrega un nivel de estrategia al juego, lo cual es un punto a su favor.
- Conclusión
En resumen, Daymare: 1994 Sandcastle es un juego que bebe claramente de la fuente de Resident Evil, ofreciendo una experiencia de terror y supervivencia con toques propios. A pesar de una narrativa que no llega a ser memorable, el juego logra crear una atmósfera intrigante. Sin embargo, los controles deficientes durante el combate pueden ser una fuente de frustración para los jugadores. En cuanto al apartado visual, el juego destaca en términos de diseño gráfico, aunque la falta de diversidad en los escenarios y enemigos puede causar fatiga visual.