El empresario y músico Sean “Diddy” Combs fue sentenciado a 50 meses de prisión tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte para participar en prostitución bajo la Ley Mann. Combs, quien enfrentaba un juicio federal de dos meses, había solicitado una sentencia reducida de 14 meses, mientras que los fiscales inicialmente pedían entre cuatro y cinco años, y más tarde aumentaron su reclamo a más de 11 años. Cada cargo conlleva hasta 10 años de prisión.
Durante la audiencia de sentencia, los fiscales criticaron la falta de admisión de culpa de Combs, destacando que continuaba realizando compromisos públicos mientras estaba detenido. Por su parte, los abogados de la defensa subrayaron el impacto positivo de Combs durante su tiempo en el Metropolitan Detention Center, donde enseñó habilidades empresariales a otros internos, y pidieron clemencia para permitirle continuar su labor desde el exterior.
Todos los hijos adultos de Combs intervinieron en la audiencia, apelando a la transformación personal de su padre y pidiendo al tribunal que considere el bienestar familiar, especialmente el de su hija menor de 2 años. Además, su abogado mencionó que Combs sufrió adicción y trauma prolongado, enfrentando condiciones duras en prisión, incluyendo ataques de otros reclusos y falta de sueño, lo que agravó su situación.
El juicio original incluyó acusaciones graves como tráfico sexual, violencia y abuso de drogas. Aunque Combs fue absuelto de los cargos mayores de tráfico sexual y conspiración, se le encontró culpable de los cargos de transporte para prostitución. Tras el veredicto, Combs y su equipo de defensa consideraron la decisión como una victoria parcial y se enfocan en su futuro tras cumplir la sentencia.